Al igual que ocurre con todos los servicios vía satélites geo-estacionarios, la latencia promedio (tiempo necesario para que una transacción de datos realice un recorrido completo) es de unos 0.5 segundos; ello es debido a la
distancia que debe cubrir la transmisión, que es de 45.000 millas (distancia desde la antena hasta el satélite y retorno hasta la hub). En la mayoría de aplicaciones de voz/datos este periodo de latencia es superior, pero acostumbra a pasar desapercibido por el usuario.