Este dato es fundamental conocerlo cuando vamos a utilizar nuestra baterías en aplicaciones donde exista una demanda de corriente alta o también conocido cómo pico de arranque.
Por ejemplo, arrancar un motor, maniobrar una Hélice de Proa, compresores, etc… Este tipo de cargas disponen de un placa de características o ficha técnica donde podemos consultar la intensidad que requieren.
La Capacidad de Arranque en Frío, también conocida como Cold Cranking (CCA) es la corriente de alta intensidad que la batería puede proporcionar a muy baja temperatura. Para medirla, la batería se debe someter a una descarga de corriente constante, bajo condiciones dadas de temperatura (-18º C/ 0º F), tensión final y tiempo según norma SAE. El criterio de aceptación para este ensayo es que la tensión entre terminales sea mayor o igual que 1,2 Volt por celda (VPC) o 7,2 Volt de tensión para baterías de 12 Volt, transcurridos 30 segundos de iniciada la descarga.
Diferencia entre Capacidad de Arranque y Capacidad de Arranque en Frio
La diferencia está dada por la temperatura a la que se realiza el ensayo. La capacidad de arranque en frío o cold cranking (CCA), se mide a -18º C / 0º F, mientras que la capacidad de arranque (C.A) se mide a 0º C. Este valor siempre es mayor, ya que la batería a mayor temperatura tiene un mejor rendimiento.
Si quieres conocer qué batería es más recomendable para tu caso, consúltanos.
En la lista de precios de Victron Energy puedes ver el CCA en función del tipo de batería. Véase el ejemplo.